¿Qué son los papilomas? ¿Qué los produce?
Los papilomas son proliferaciones benignas de la piel causadas por el virus de papila humano. Hay más de 100 tipos diferentes de virus. Los genotipos que afectan al pie y producen estas lesiones son los 1, 2 y 4. ¿? Estos no suelen derivar en lesiones malignas.
Este tipo de lesiones pueden afectar a cualquier edad, no obstante en las estadísticas se encuentra que el 65% de los afectados está comprendido entre 5 y 20 años en relación al estado inmunológico y hormonal. La incidencia de esta patología aumenta en la edad escolar y alcanza sus máximos entre los 12 y 16 años, después de estas edades la incidencia desciende bruscamente hasta los 20 años.
Es infrecuente encontrar verrugas en lactantes, niños menores de 5 años y en ancianos. Si que se observa una mayor incidencia en adultos que tienen el sistema inmune deprimido.
En los estudios publicados no se observa que haya una mayor incidencia en hombres o en mujeres, lo que si que se observa es que son más frecuentes en deportistas en general.
¿Cómo son estas lesiones?
Estas lesiones se pueden presentar de manera aislada o bien agrupada. Suelen tener un aspecto hiperqueratósico, como una callosidad. Muchas veces se pueden confundir con durezas.
Frecuentemente presentan un halo blanquecino alrededor y un punteado negruzco. Suele doler al pellizco de la lesión y no a la presión directa.
Las localizaciones de los papilomas principalmente son en zonas de carga, en partes donde el pie contacta directamente con el suelo. Suelen producirse en las zonas de presión o fricción donde la piel está más débil y puede haber una lesión que es la puerta de entrada al virus.
Dependiendo del tiempo de evolución desde el contagio y del tipo de paciente la evolución puede ser variada. Las sintomatología tampoco es la misma para todos los pacientes. Dependiendo de la afectación de una zona de carga o no pueden pasar desapercibidas hasta que son muy grandes y realmente llegan a molestar.
¿Qué factores predisponen al contagio?
El virus que produce los papilomas pertenece a la familia de los virus de ADN de cadena doble. Su reservorio se encuentra en los propios humanos que padecen estas lesiones y en el propio medio ambiente. Este virus tiene una especie de cápsula que lo protege para que no se degrade cuando se encuentra fuera del cuerpo humano.
Los espacios más frecuentes para el contagio son los lugares públicos como baños, duchas, vestuarios, piscinas…
Unos deficientes hábitos de higiene general pueden precipitar en el contagio de estos virus del papiloma humano.
¿Cómo podemos prevenir el contagio?
El contagio lo podemos prevenir con una higiene diaria de los pies y aplicación de crema hidratante que favorezca que la piel esté hidratada, elástica y más resistente.
Evitar el calor y la humedad excesivas que pueden estar causadas por un calzado poco transpirable, calcetines de materiales sintéticos…
No intercambiar el calzado ni ropa interior con otras personas.
Usar chanclas y calcetines de plástico en las duchas